En ocasiones, nos encontramos con unas cuantas placas de fibrocemento en nuestros domicilios, que forman parte de la construcción o reforma que realizaron nuestros padres o abuelos en los años 70-80 cuando la URALITA estaba de moda.
En la actualidad, una vez demostrada la peligrosidad de uno de sus componentes; el AMIANTO, nos vemos en la necesidad de deshacernos de este materia al realizar una nueva reforma en nuestras casas.
Nos informamos de la metodología a seguir para dicho fin y nos encontramos que no todo el mundo puede intervenir sobre este considerado residuo.

Pero «si solamente son cuatro placas de nada que se cogen con la gorra y ya está».
Pues bien, lo que muchos desconocen es que para este trabajo existe un protocolo marcado que NO deberíamos incumplir.
La manipulación indebida de esta materia genera peligro contra la salud no solo de el individuo que actúa directamente sobre el, también pone en riesgo a todos los transeúntes que se encuentren en la vecindad e incluso podría ser perjudicial hasta para alguien que se encuentre a muchos kilómetros. Puesto que nuestra ropa se convierte en portadora de las fibras y si realizamos un largo viaje, cualquiera tiempo después podría inhalarlas.

Write a comment:

*

Your email address will not be published.

Hablar
1
¿Necesitas ayuda?
Bienvenido a Reciclaje Valladolid 👋

¿Te podemos ayudar en algo?